29.11.14

La bondad del asno: Platero y yo
















"¡Pobre asno! ¡Tan bueno, tan noble, tan agudo como eres! Irónicamente... ¿Por qué? ¿Ni una descripción seria mereces, tú, cuya descripción cierta sería un cuento de primavera? ¡Si al hombre que es bueno debieran decirle asno! ¡Si al asno que es malo debieran decirle hombre! Irónicamente... De ti, tan intelectual, amigo del viejo y del niño, del arroyo y de la mariposa, del sol y del perro, de la flor y de la luna, paciente y reflexivo, melancólico y amable, Marco Aurelio de los prados..." Enjundioso y vindicativo Juan Ramón Jiménez en Platero y yo,  rompiendo una lanza a favor de la bondad del animal. Poniendo los puntos sobre las íes de la malicia del hombre. Nunca entendí que se aplicara el calificativo de burro al individuo torpe o manazas o agresivo. No sé si hemos sido generosos con los animales que tanto nos han aportado. Tanta ternura del poeta no tiene cabida en el lenguaje de la granja humana, donde se malgastan y desvirtúan a lo tonto las palabras. A veces el cuerpo pide la lectura calma de una obra clave que aporta serenidad y reflexión. Y que los adultos parece que hemos olvidado. Como a los entrañables asnos.



Mosaico romano



6 comentarios:

  1. Seguro que NO hemos sido ni somos generosos con los animales. Hay mucho humano (léase bruto) suelto...
    Saludos,

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  2. Nunca el animal por encima del hombre, nunca al hombre por encima del animal. cada uno en su lugar.
    Eso sí, se supone que este animal, el humano tiene más inteligencia que el otro, aunque no apuesto mi cabeza nunca por una afirmación así.
    Algún burrito he tenido cerca, y alimentado. Algunos humanos también. Y a algunos humanos tan humanos como los burros.
    Solo el consuelo que nos proporcionan nos hace amarlos más. Y eso no es justo para con ellos, los animales (burros o no). Esa es la falta de respeto hacia ellos que me parece intolerable por nuestra parte. Los usamos, los queramos más o menos, y aunque nos salga una obra de arte en su honor ¿en su honor?. Y jamás podrán defenderse (o agradecer). Simplemente no pueden emitir opinión sobre ella.
    Esto es para mí un poco como la visión del que usa el oso en un circo. Exactamente lo mismo. Intolerable.

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  3. Aprendí DE MEMORIA cada capítulo de Platero y yo en mi escuela primaria. lo estudiábamos para auto dictados. Siempre me emocionó la manera simple, sencilla y muy emotiva con la que el autor se dirigía al burrito.

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  4. Mirar el asno,
    verse en un espejo
    y desagradarse a uno mismo.

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  5. ¡Qué delicia de lectura cuando lo hice ¡ Amé a Juan Ramón Jimenez por siempre o a su mujer que aún hay polémicas por la autoría de su obra...
    un beso

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