26.9.13

La otra cucaracha, la de Clarice Lispector













Inquietante la herencia de Kafka en otra voz literaria:

          "Del mundo por fin húmedo de donde yo emergía, abrí los ojos y reencontré la grande y dura luz abierta, vi la puerta entonces cerrada del armario.
           Y vi la mitad del cuerpo de la cucaracha fuera de la puerta.
            Proyectada hacia delante, erguida en el aire, una cariátide.
            Pero una cariátide viva."

Así de inquietante se nos ofrece Clarice Lispector en su novela La pasión según G.H. Uno no imagina la cucaracha como tal, sino que se reconvierte en metáfora. Kafka y Lispector nos acercan al insecto que llevamos dentro. ¿Vivimos tan expectantes como ellos? 

           "Pero fue entonces cuando vi la cara de la cucaracha.
            Ella estaba de frente, a la altura de mi cabeza y de mis ojos. Por un instante permanecí con la mano parada en lo alto. Después, gradualmente, la bajé."

Se me antoja diálogo sordo. Pero también sincero. Aproximación a nuestros dos rostros. ¿Cuántas veces no hemos visto el insecto al contemplarnos en el espejo o al hallarnos frente a frente con otro de nuestra especie? Es solamente una interpretación.