26.1.23

Ich bin Dein Mensch o El hombre perfecto

 












Pensamientos del personaje Alma según conduce su coche en busca del humanoide, en el filme El hombre perfecto

"¿No son de nuestros deseos insatisfechos, de nuestras fantasías y la eterna búsqueda de la felicidad de donde surge nuestra humanidad? Si dejamos que los humanoides sean nuestros cónyuges crearemos una sociedad de adictos, atiborrados y hartos de que siempre se cumplan sus necesidades y de un flujo constante de reconocimiento personal. 

¿Qué estímulos nos harían relacionarnos con individuos convencionales, desafiar nuestros límites, superar los conflictos, cambiar? Es de esperar que cualquiera que viva con un humanoide mucho tiempo acabará siendo incapaz de entablar relaciones humanas normales. Desaconsejo rotundamente autorizar que los humanoides puedan ser nuestros cónyuges". 

Atentos pues, en estos tiempos de avances científicos y tecnológicos revolucionarios, a los cíber, los robots o los humanoides virtuales. Hoy en el laboratorio, mañana en la calle. ¿Cómo será la relación de los humanos biológicos con estos otros artificiales que quieren ser como nosotros? La película alemana El hombre perfecto fantasea con ello hasta el espacio de los aspectos emocionales y afectivos. Pero claro, también uno piensa: ¿no hay muchos humanos comunes que se comportan como robots? Bien sea por su apatía o su exceso de formalismo o represión de las emociones el caso es que cuesta llegar a la entraña de algunos de nuestra propia especie. 






















* Fotografía de la actriz Maren Eggert

10 comentarios:

  1. A veces son preferibles los robots, son más previsibles.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues y a verás el día que se rebelen. En lugar de Rebelión en la granja (Orwell) se escribirá Revuelta en el taller.

      Eliminar
  2. Un abuena reseña, ya lo creo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Simplemente me resultó atractiva la película, más el tema y seguramente los protagonistas.

      Eliminar
  3. La tecnología a llegado a tanto con sus algoritmos complejos, que en ocasiones tengo más empatía de una máquina que la de mi semejante... Definitivamente no, los humanos no somos tan perfectos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ni lo seremos nunca, pero mejor tener miradas relativas. Desde el Paleolítico hasta nuestros días algo ha cambiado, ¿no? Gracias por pasar, Teresa.

      Eliminar
    2. Todo avanza. El avance es imparable.

      Eliminar
  4. Tomo nota de esta película. Una pregunta: ¿Está ahora en cartel?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En los cines, ni idea, es de hace tres años. Tal vez en la plataforma Prime. Gracias.

      Eliminar