4.2.16

Recuerda, cuerpo. Un poema de Kavafis















Recuerda cuerpo, cantaba Konstantino Kavafis. Y tal vez el cuerpo que no era el mismo le hacía recordar. O acaso hablaba de lo perdido, y la pérdida era aún joven mientras su cuerpo iba siendo más viejo. O la voz se manifestaba como testigo del deseo; el que nunca se materializó junto a otros deseos y no llegó a habitar otros cuerpos. Pero ¿es siempre el pasado una caja cerrada? ¿Hay una última puerta de las estancias del amor? ¿Permanece una rendija por donde el recuerdo llega flotante y generoso? La memoria esboza sonrisas disimuladas en los labios ancianos.  


"Recuerda, cuerpo, no sólo cuánto fuiste amado,
no solamente en qué lechos estuviste,
sino también aquellos deseos de ti
que en los ojos brillaron
y temblaron en las voces - y que hicieron
vanos los obstáculos del destino.
Ahora que todos ellos son cosa del pasado
casi parece como si hubieras satisfecho
aquellos deseos – cómo ardían,
recuerda, en los ojos que te contemplaban;
cómo temblaban en la voz, por ti, recuerda, cuerpo "