5.6.14

François Cheng y la aparición de la belleza




















"La belleza es un aparecer ahí." François Cheng, en Cinco meditaciones sobre la belleza. Una rosa, el ejemplo típico, y no se pregunte más. Pero también una sonrisa, la aparición de alguien que nos sorprende y nos llena de gozo, una actitud generosa que nos hace concebir esperanzas, un alba cuya luz purifica, una idea cargada de hallazgo o comprensión para nuestra actividad intelectual, un paisaje inabarcable por su multiplicidad de elementos, una representación plástica deslumbradora. Es un estar esperando, pues por su propia condición de ser bella, la belleza nunca se detiene ni es inerte. Se hace y se deshace. Llega y se va para luego regresar y volverse a ir. ¿Es un estado, una condición, un artificio en sí misma? Acaso una revelación. "Toda belleza es singular y, según los momentos y las luces, su manifestación, por no decir su 'surgimiento', es siempre inesperado. Una figura de belleza, incluso una a la que estuviéramos acostumbrados, debería presentársenos cada vez como nueva, como un advenimiento. Por esta razón la belleza siempre nos conmueve. Hay bellezas llenas de una luminosa dulzura que, de repente, por encima de las tinieblas y del sufrimiento, nos remueven las entrañas; otras, surgidas de algún subterráneo, nos atrapan o nos arrebatan con su extraño sortilegio; otras, puro fulgor, subyugan, fulminan", puntualiza Cheng. ¿Propio todo ello para calificarla de manifestación pero también como de inasible belleza?


















Arriba: Ukiyo-e de Kitagawa Utamaro


7 comentarios:

  1. La belleza está presente en mas sitios de los que parece , es solamente sensibilidad de apreciarla.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Magnífico como siempre tu escrito.. y a raíz de esto, me pregunto si no es el arte el que siempre ha estado atento en la búsqueda de esa belleza inasible..

    ResponderEliminar
  3. Qué reflexión más interesante la de François Cheng. La belleza es aparecer. Hay un determinado momento para la belleza, esa que tiene la luz perfecta, el momento perfecto y el perfecto observador (porque no hay belleza sin espectador). Me llevo esta idea a la cama...

    Muchos besos

    ResponderEliminar
  4. Dice Gep el personaje de La Gran Belleza en una escena conmovedora de la película :

    "Termina siempre así, con la muerte. pero antes, hubo vida. Escondida debajo el bla, bla, bla. Y todo sedimentado bajo los murmullos y el ruido. El silencio y el sentimiento, la emoción y el miedo. Los demacrados, caprichosos destellos de la belleza. Y luego la desgraciada miseria y el hombre miserable. Todo sepultado bajo la cubierta de la vergüenza de estar en el mundo. Bla, bla, bla, bla. Más allá, está el más allá. Yo no me ocupo del más allá. Por lo tanto que esta novela dé comienzo. En el fondo, es solo un truco. Sí, es solo un truco."

    Un truco quizás para perseguir, asir, poseer a la gran belleza, esa hada encanta, esa dríada que nos conmueve y nos hace temblar siempre.
    Me gusta el concepto de F. Cheng sobre la belleza, esa mirada inconfundible de oriente.
    Gracias!

    ResponderEliminar
  5. Quizás nos emociona la belleza porque intuimos que en ella existe una verdad profunda que es imposible verbalizar. No hay palabras, pues eso. Lo bello tiene esa dimensión al margen de la razón y la lógica convencional. Hoy he visto una nube con forma de trébol que se ha desvanecido en segundos, pero ha quedado grabada y permanente en mi memoria porque el acontecimiento: nube, mirada y estado de ánimo han confluido en ese segundo y todo era perfecto.

    ResponderEliminar
  6. Me parece una meditación preciosa sobre la belleza, porque no la hace desde el ser que la descubre con su carga emocional, y desde luego que está ahí con independencia, pero es como una carta que no precisa un sobre para ser enviada, observada o contenida
    Está para dejar de estar y para volver de otro modo, con miles de formas distintas, y sí es de algún modo asible, en el sentido de que nos pertenece ese instante que la hacemos nuestra, aunque se marche, y ahí reside parte de su maravilla.

    ResponderEliminar
  7. "...un aparecer ahí"... pues aquí aparezco y me encuentro en un marco excelente para hablar de belleza, afortunadamente inasible.

    Saludos.

    ResponderEliminar